- Dimensión Territorial
La cartografía social no solo representa espacios físicos, sino que impulsa procesos de construcción colectiva del territorio.
Se convierte en una herramienta de indagación territorial desde lo local, combinando técnicas etnográficas con análisis espacial.
Su valor radica en que articula dinámicas locales, discursos críticos y prácticas sociales vinculadas al desarrollo comunitario.
Representa el escenario real donde interactúa la comunidad: montañas, ríos, caminos, zonas urbanas o rurales.
Pueden ser físicos (calles, barrios, bordes naturales) o simbólicos (identidades barriales, fronteras sociales).
Los participantes los trazan como signos de pertenencia e identidad, revelando cómo las fronteras invisibles configuran la vida local.
Uso del suelo: viviendas, agricultura, industria y espacios públicos.
La cartografía social permite capturar con detalle esta organización.
Se identifican transportes, escuelas, centros de salud y equipamientos, evaluando su presencia y accesibilidad.